REDACCIÓN 'EL OBSERVATORIO'
Es superhermética y poco se sabe de ella. Antes había una web de acceso, pero ya es privada. Al parecer, y según cuentan diferentes medios internacionales, en ella pueden estudiar Inteligencia Artificial o Ingeniería espacial sólo sus 10 hijos -que se conozcan- y los de sus amigos multimillonarios.
Fue en 2014 cuando el excéntrico magnate decidió fundar su propia escuela con una metodología propia, tras su mala experiencia de niño, tal y como recogen en el portal de noticias The Hustle, tras una entrevista que realizó a un medio de comunicación chino: “Yo odiaba ir a la escuela cuando era pequeño, era una tortura”. Y es que Musk habría sufrido acoso escolar durante su infancia en Sudáfrica.
Así que apoyado por un ex profesor de la escuela Mirman para pequeños superdotados, ubicada en Mulholland Drive, Los Ángeles, creó su propio y selectivo centro educativo. Para esta televisión de Pekín, Musk hablaría por primera vez de 'Ad Astra' -una frase en latín que significa literalmente "hacia las estrellas"- y explicó que su modelo académico estaría orientado a buscar las aptitudes de los estudiantes y no en calificarlos con notas.
Según recoge BBC Mundo, la escuela contaba hasta hace unos años con 40 estudiantes, desconociéndose el número actual. Asimismo, los niños no se agrupan en clases según su edad; a estos se les enseña a colaborar en equipo y están todos juntos. El rango de edad del centro sería entre los 7 y los 14 años.
Además de las materias mencionadas al comienzo de este artículo, 'Ad Astra' impartiría Robótica, Codificación o Ciencias aplicadas, entre otras asignaturas. “La filosofía de la escuela es experimental y no está basada en un currículo. Elon Musk decidió que quería educar así a sus hijos y a un pequeño grupo de niños. Es algo que él desarrolló, es su idea, no es una escuela tradicional”, dijo al citado medio la escritora e investigadora Christina Simon, autora del libro Más allá del catálogo: guía de una conocedora de escuelas privadas de primaria de Los Ángeles.
La BBC llegó a visitar ‘Ad Astra’, con la condición sine qua non de no revelar más detalles de los que se le dijeran. El medio británico pudo averiguar que los alumnos no tienen que pasar ningún examen de Coeficiente Intelectual para ser admitidos. Los posibles estudiantes potenciales tan solo visitan las instalaciones e interactúan con el personal docente, quienes evalúan si los pequeños podrán o no disfrutar y aprovechar este peculiar modelo educativo.
¿Y las carreras universitarias?
A Elon Musk tampoco le importan. El multimillonario ha expresado en alguna entrevista que es “absurdo” que las empresas contraten a sus trabajadores en base a su grado académico. Por ello, no es un requisito indispensable tener título universitario para trabajar en Tesla, SpaceX o cualquiera de sus empresas.
Tanto es así que mantiene que se puede aprender cualquier tema online y de forma gratuita; y puso como ejemplo a algunos 'gigantes' tecnológicos como Bill Gates, Mark Zuckerberg o Steve Jobs, quienes dejaron la universidad.
En fin, que Musk y sus 234,4 billones de dólares de fortuna le dan para hacer lo que le venga en ganas, en cualquier ámbito personal o profesional.